Después de salir de una feria del condado, los Bolsa se pierden a través de un campo de maíz y chocan con un espantapájaros. Se lo llevan a casa, donde Muriel le corrige y le hace la boca para que pueda hablar. Pero él se deprime, porque no es lo suficientemente aterrador para espantar a los atacantes de Muriel, así que decide entrenarse para ser mucho más fuerte y aterrador, convirtiéndose en un peligro para todos.