Una maleta con un conejo le conceden deseos a los inquilinos.
Los niños de la vecindad hacen una carrera, pero El Chavo se cansó de correr contra Quico y Ñoño, y luego en el camino conoció a un mago en un auto, por eso le da una zanahoria al conejo del mago y encuentra a Ñoño y Quico cansados, pero siguen su carrera. Entonces cuando el conejo aparece en un maletín, encuentra al Chavo y lo sigue hasta la vecindad.
Sin embargo, después de que Ñoño y Quico perdieran su carrera, el Chavo arregla el brazo de la muñeca Serafina de la Popis con el poder mágico del conejo cuando ella estaba llorando y luego decide contárcelo a sus amigos, pero Ñoño y Quico no le creen porque el Chavo le había contado la historia a la Popis y dejan que el maletín desaparezca de su vista, con lo que Paty le dice al Chavo que lo retaron y entonces éste les intenta contestar con la magia del maletín y para no se burlen nuevamente de este último, el conejo decide convertir a Quico y a Ñoño en monstruos, y ambos se enteran de que los son, por lo cual empiezan a asustarse y quejarse por lo que se burlaron de los cuentos del Chavo, por eso Paty y la Popis deciden que el Chavo haga normales a Ñoño y a Quico otra vez con el conejo, y ambos lo perdonan por la broma pesada, pero con ayuda del conejo concede a toda la vecindad sus deseos:
Godínez pide manejar una patineta, Paty gana un juego de pintura, Ñoño conduce una tabla de surf, Quico consigue un auto de juguete, la Popis adquiere un juego de tenis, conforme pasan los deseos El Chavo queda sorprendido y dice «con tantos deseos, ahora todos mis amigos se volvieron locos». Enseguida llega Don Ramón con una llanta pinchada de su bicicleta y se sorprendió de los juguetes que desearon los niños; de paso desea que se arregle su bici. El conejo aparece y le cambia su bicicleta por una motocicleta crucero ademas de un traje de motociclista. Don Ramón se enorgullece y dice que con estas ropas y su auto ahora sera un motociclista como había soñado (imaginándose que evade el paso al Señor Barriga como camionero). No solo eso Ramón desea que para completar su sueño, quiere viajar con la Rubia Margot; es cuando aparece Doña Cleotilde y logra hacerse pasar por la Rubia Margot para que Don Ramón se enamore de ella. Tras irse a toda pastilla aparece el Señor Barriga preguntándose como compró su motocicleta en lugar de pagarle la renta.
En eso se sorprende de la cantidad de juguetes y el Chavo como de costumbre le pega a Barriga con un batazo. De ahí deseó que pague las rentas, y el conejo le da mucho dinero, el gordo alarmado dijo «por la golpiza que me diste, estoy viendo alucinaciones» y se desmaya. Jaimito el Cartero llega y desea un cartero robot que envíe las cartas por él, pero este se descontrola cuando habla de Tangamandapio (el robot provenía de ahi) y termina persiguiendo al Chavo. En eso llegan Doña Florinda y el Profesor Jirafales donde Quico les dice que tiene un mp3 con la serie completa del Justiciero Enmascarado gracias a los deseos del conejo, y le explica que también puede tener el suyo. En eso el conejo les da ropas de boda y consigue que se case con el Profesor Jirafales; ante el temor de este ultimo.
Pero esto causa un verdadero problema, el cual se soluciona cuando llega el mago a la vecindad y recupera el conejo encerrándolo en una jaula, explicando que el conejo forma parte de su show pero en verdad es muy listo y se aprendió todos sus hechizos. El Chavo le da la bolsa y el mago hace que todo vuelva a la normalidad dado que el conejo siempre agota los polvos mágicos por obsequios y a la vez son difíciles de encontrar. Entonces les quita todos los deseos, incluyendo el de Don Ramón y Doña Cleotilde y con suerte a la muñeca de la Popis no se le cayó su brazo. Al final el único que quiere de deseo al conejo mágico es el Chavo, en el que desea que sean felices sin tener un montón de cosas, esto hace que todos se pongan tristes. El mago le dice que los deseos no se hacen con una pizca de magia sino con los deseos en el corazón, accion que entra Jirafales diciendo «el mago tiene toda la razón, chavito». Aunque el mago como recompensa le regala una torta de jamón diciendo «me lo dijo un conejito» y se observa a Doña Clotilde abrazando a Don Ramón en su bicicleta.
