Dos payasos, uno más pasado de moda, uno más moderno, cada uno reclama una esquina de una calle en particular en Aron City, y decide jugar una serie de bromas a un inocente espectador para determinar cuál de ellos es más divertido. Ese espectador resulta ser Johnny, quien odia a los payasos y se ve humillado repetidamente por sus chistes prácticos.