Después de decir que es un prisionero político en el programa de radio de Birch Barlow, Sideshow Bob es liberado de prisión. Pronto, se anuncia que Bob es el candidato republicano para ser alcalde de Springfield. Bart y Lisa apoyan la campaña de Joe Quimby pero a pesar de sus esfuerzos, Bob gana la elección por amplia mayoría. Con el correr de los días, los Simpson se despiertan para descubrir que su casa estaba siendo demolida por obstruir la construcción de la vía ferroviaria Matlock. Bart y Lisa comienzan a sospechar que Bob había arreglado las elecciones. Mientras mira por quién había votado cada ciudadano, Lisa recibe un mensaje de alguien que dice saber qué pasaba. El ayudante misterioso resulta ser Waylon Smithers, quien estaba en desacuerdo con algunas de las políticas de Bob. Le da a Bart y a Lisa el nombre de un hombre que había votado por Bob, pero que en realidad estaba muerto. Los niños descubren que casi todas las personas que supuestamente habían votado por Bob estaban muertos. En el juicio, Bart y Lisa engañan a Bob para hacerlo confesar su crimen, y éste vuelve a prisión.